Soy un convencido del enorme poder de la visualización, y como seguidor de este concepto, intuyo que Colombia se ha visualizado así mismo como una nación sedienta de sangre. Un país que se arma para combatir a sus propios habitantes, esta condenado a una cadena de desgracias, y es que aquello que comienza como un crimen "necesario" en los términos del estado, con el tiempo luce como el circulo vicioso de asesinatos que hoy vivimos. Un niño fue victima del asesinato de su padre en forma violenta, luego al hacerse hombre buscó al asesino y cobró por su propia mano justicia, sin embargo, al final la perdida continuó y además acompañada por la culpa. Ahora y como si fuera poco pretendemos implementar en uno de los países mas corruptos del mundo, la pena de muerte, y la pregunta lógica es ¿cuantos inocentes terminaran condenados a ella? o tal vez como también los niños han ingresado al mercado del delito, ¿algún día ellos deberán ser condenados?. Basta ver un noticiero Colombia...