Ir al contenido principal

La tercera guerra mundial: una lucha por los recursos naturales

Guerras por petróleo, por el agua, guerras por la tenencia de la tierra, desplazados, hambre, mutilados, huérfanos, desnutrición, intolerancia, un planeta cada vez mas hostil, cambios climáticos extremos, esta es la cara de nuestro mundo y la lucha desaforada por la supervivencia apenas comienza, dejando a su paso una larga línea de sangre y destrucción.
Sabemos hoy, que donde hay petróleo, siempre hay conflictos, pero estos se extenderán ante cuando sobrevenga escases de alimentos y agua. La tierra y el poder que genera poseerla, ha sido otro gran generados de injusticias y el poder que otorgan las armas será enfilado contra aquellos pobladores de regiones ricas en recursos.
Llegará el momento en que toda invasión será justificada, todo conflicto se presentara como la medida necesaria, tras una noble causa y las naciones subdesarrolladas serán manipuladas por las grandes potencias, la globalización convirtió todo en mercancía, aun la dignidad, al vida y los derechos fundamentales, esto acompañado de los grandes cambios climáticos que provocaran hambrunas en múltiples regiones, cambiará el mapa político y económico del mundo.
El futuro del mundo es poco prometedor y lejanamente reversible, estamos en un camino de coalición contra aquello que mas tememos nosotros mismos y nuestra enorme capacidad de indolencia, de destrucción.
Detrás de los acuerdos militares, de las ayudas contra la pobreza y el terrorismo se esconde la verdad simple, el camino esta allanado, para el caos, cuando el mundo sea incapaz de sostener a miles de millones de seres humanos, aquellos con el poder y las armas, serán llamados a dominar; al final solo quedaran las ruinas de una civilización que pese a tantos avisos, optó por su autodestrucción, antes que doblegar su orgullo, el orgullo de ser llamados hijos de Dios.

Germán Camacho López

Comentarios

Entradas populares de este blog

La oveja y la granja

Imagen tomada de:  http://www.animalesonline.net   © del autor Estando cierto día en la granja unas ovejas, una de ellas se sale del encierro y al intentar entrar de nuevo; se encontró con que la puerta había cerrado quedando ella afuera y su comida dentro. Intentó una y otra vez sin poder lograrlo ante la burla de las otras; así que decidió darse vuelta y al hacerlo, pudo ver en frente suyo la libertad y un bosque lleno de alimento. Muchas veces la falsa seguridad, nos ciega ante oportunidades evidentes.

La pasión por el conocimiento y el aprendizaje continúo

Adquirir nuevas destrezas y ampliar nuestros conocimientos, debe ser una  tendencia continua, valorada y motivada todo el tiempo. Aprender es hacerse fuerte, favorecerse a si mismo, ampliar los horizontes, y tomar la llave de las oportunidades. Por tanto, debemos automotivarnos en el conocimiento y al mismo tiempo motivar a otros. Cuando una persona tiene contacto con nuevos procesos, aplicaciones, materias y formas de hacer las cosas; su interés por aprender se fortalece, es un ejercicio que se torna en el más saludable de los hábitos. Sentir pasión por el conocimiento es una virtud que nos hace crecer como personas; tornándonos motivados, persistentes, desafiantes y positivos. Nos conduce a entender el aprendizaje como una útil herramienta para la resolución de conflictos. Sin duda, los beneficios se hacen evidentes cada vez que aprendemos algo nuevo, ya sea social, laboral o académicamente. El mundo es una amalgama de experiencias y para tomar el camino de estas, es convenien

Las Afirmaciones Racionales

La forma en que “vivimos” los acontecimientos cotidianos. Envía a nuestro cerebro una descarga emocional que genera una determinada respuesta. Sin embargo, buena parte de nuestras reacciones, emociones y conductas; están influenciadas por creencias, enraizadas en lo profundo del pensamiento. Y desde ese “supuesto” acerca del funcionamiento de las cosas, parten las afirmaciones racionales o irracionales. Las primeras traen un estimulo positivo para el crecimiento y el desarrollo de la madurez: “me gustaría que…” “preferiría que…” “quisiera que…”. Las segundas absolutizan y se rigen por creencias inamovibles: “debería…” “tendría que…”   Cuando por alguna razón no se logra cumplir los objetivos. Las emociones liberadas tienen un porqué constructivo. Básicamente, instruir a la persona en la consecución de metas; en la superación de obstáculos, y en la adaptación de escenarios inesperados.   Cuando no hay una adecuada salud psicológica, el individuo no logra afrontar la inquietud, el d